Entrevistamos a Neus Garriga Turon, licenciada en Odontología, especialista en Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial y dedicada a la práctica profesional de niños y adultos.
Le hemos preguntado qué remedios son útiles para aliviar las molestias de los primeros dientes de los bebés y recomienda totalmente el uso de los collares de lactancia para la dentición. También nos ha explicado cuando salen los primeros dientes, cuando los niños deben empezar a limpiárselos y cuando recomienda hacer la primera visita al dentista.
1.-Cuando llega un nuevo miembro a la familia, tenemos muchas dudas y muchas preguntas. Algunas llegan con la llegada de los primeros dientes. Los bebés están inquietos y a veces no sabemos qué les pasa. ¿Cuando empiezan a salir los primeros dientes?
El momento en que sale el primer diente puede variar, normalmente es alrededor de los 6 meses de edad y hasta los 9 meses, y suelen ser los incisivos inferiores. Esta fecha es variable, y no nos tenemos que asustar si hasta los 10 o 12 meses hay algún bebé que no le ha salido el primer diente. Entre este momento y los 3 años, van saliendo todos los dientes de leche, un total de 20. Estos dientes se han sido formando dentro del cartílago y el hueso de los maxilares del bebé desde que estaba dentro del vientre de la madre.
2.-¿Qué opciones podrían ser útiles para aliviar el dolor de la dentición?
Desde que sale el primer diente y hasta que se completa la dentición de leche (o temporal) es normal que las encías del bebé se enrojezan y se inflamen, y esto les provoque malestar y dolor. Este dolor hace que haya un llanto que aún no sabríamos interpretar, que coman menos o que estén intranquilos a la hora de dormir. Para aliviar estas molestias, podemos rozar las encías del bebé con nuestro dedo cubierto con una gasa húmeda, darle algún pañuelo frío (nunca del congelador) puesto que el frío aligerará la inflamación u ofrecerle algún mordedor o los collares de lactancia de silicona alimentaria para que lo vayan mordiendo y jugando con él. Todo esto ayuda a aligerar el malestar del bebé.
Es importante evitar lo que antiguamente se hacía de mojar el chupete del bebé con azúcar y ponerlo en la boca, porque lo que estaremos haciendo es crearle un mal hábito.
3.-Los collares de lactancia están hechos con silicona alimentaria. ¿Recomiendas su uso en la etapa de dentición?
Los recomiendo totalmente. Es bueno, sobre todo en estas primeras fases de erupción de los primeros dientes para que el bebé los muerda y se entretenga con ellos. Al no ser tóxicos, no hay ningún problema para que los tengan en la boca y los intenten morder. Antes de que la madre se los ponga, sería bueno que los tuviéramos en un lugar fresco, no en la nevera ni en el congelador, pero tampoco al sol. La frescura en la boca también les ayudará a aligerar estas molestias que sienten.
4.-¿En qué momento los bebés ya pueden empezar a lavarse los dientes?
Lo primero a tener en cuenta es que es bueno que vean como se lavan los dientes sus padres, y entonces pasa a ser una cosa que ellos también quieren hacer. El momento ideal depende de cada niño, pero a los 2 años es una buena edad para que empiecen con su cepillo y lo hagan como un juego (sin utilizar pasta de dientes). Muchas veces, más que cepillarse los dientes, lo que hacen es morder o chupar el cepillo, pero que tengan el hábito y que lo quieran hacer ya empieza a ser interesante. A partir de los 2 años y medio o 3 años, es bueno que los niños se cepillen los dientes primero, y después los padres les ayuden a repasarlo.
5- ¿Qué hábitos de higiene dental recomiendas para unos niños tan pequeños?
El momento imprescindible, tanto para grandes como para pequeños, es antes de ir a dormir. Es importante que durante las horas de sueño, la boca esté limpia, porque durante unas horas, no hablamos, no tragamos…, y la boca es importante que quede limpia. Hay que recordar que una vez se hayan cepillado los dientes, ya no se tome ni leche, ni zumos, ni el chupete azucarado, ni otro alimento. Sólo agua, para que así la boca siga limpia durante la noche.
6.- ¿Qué tipo de alimentos tienen que evitar los bebés para prevenir posibles problemas bucodentals?
Se tiene que controlar y limitar el consumo de azúcares refinados. Esto es lo más importante. Hay que intentar encontrar un equilibrio. No sería bueno que para almorzar se coman cereales azucarados, a media mañana galletas con chocolate, después de comer un dulce y para merendar un producto de pastelería! Hay que encontrar un equilibrio. Combinar unos cereales por la mañana con una fruta por la tarde o un bocadillo de algún embutido por la mañana con fruta a media mañana… Sobre todo no abusar de las bebidas azucaradas y de los zumos de frutas envasados. Limitarlos a un par de veces por semana. Y lo más importante es combinarlo con un buen hábito de higiene oral.
7.-¿Qué otros consejos darías a los padres de un niño pequeño sobre la higiene bucodental?
Sobre todo, y lo más importante, es que no se convierta la higiene bucodental en un castigo o una “bronca” en casa, que se haga con naturalidad, igual como nos peinamos por la mañana o nos lavamos la cara. Se puede trabajar la motivación del mismo modo que trabajamos otras cosas en casa, por ejemplo con pegatinas de soles y nubes para reforzar cuando se cepillan y lo hacen bien.
8.- ¿En qué momento se tiene que empezar a ir al dentista?
Es bueno que hacia los 5 o 6 años haya una primera revisión. Normalmente no hay que intervenir en ningún tratamiento, pero es bueno para descartar cualquier patología y también para que el niño vaya con tranquilidad y vea que se trata de una visita normal. Lo más importante es que antes de estas visitas, nadie en casa hable de ninguna mala experiencia al dentista, ni de miedo, ni de dolor, ni de arrancar dientes. Lo que hacemos con estos comentarios es transmitir a los más pequeños un miedo injustificado que hace que ya vayan condicionados.
¡Gracias, Neus! Seguiremos tus consejos 😉
Neus Garriga también es profesora asociada del Departamento de Ortodoncia de la Universidad Internacional de Catalunya (UIC), miembro de la Sociedad Española de Ortodoncia (SEDO) y de la Academia de Ciencias Médicas de Catalunya y Baleares y de la Sociedad Catalana de Odontología y Estomatología (SCOE).